Cuadernos de Campo
PORQUE PARA CONTARLO, PRIMERO HAY QUE VIVIRLO...
viernes, 22 de marzo de 2024
"EPIFANIAS OVNI" en La Rosa de los Vientos
sábado, 16 de marzo de 2024
"EPIFANIAS OVNI: Contactados y sectas ufológicas: los auténticos, los falsos y los chalados" CUADERNO DE CAMPO 11 de Manuel Carballal. INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
La Real Academia Española (RAE) define el término epifanía, en su primera acepción, como “manifestación, aparición o revelación”. En la mayoría de las culturas las epifanías son experiencias místicas en las que los chamanes, brujos, sacerdotes u oráculos interpretan las señales sobrenaturales.
En el cristianismo, la epifanía es la festividad en la que se celebra que Jesús ha revelado su presencia en el mundo. Y, como en el cristianismo, en otras religiones se celebra la epifanía como la manifestación de la divinidad ante los hombres.
En ufología denominamos contactados a aquellas personas que aseguran mantener algún tipo de comunicación con la inteligencia responsable del fenómeno OVNI. La mayoría identifican esa inteligencia como de origen extraterrestre, intraterrestre, interdimensional, mística, etc.
La pretensión de mantener una comunicación con inteligencias no humanas se pierde en la noche de los tiempos. Desde el origen mismo de las religiones, hechiceros, brujos, magos, chamanes y sacerdotes, han afirmado recibir mensajes de dioses, espíritus, demonios e incluso habitantes de mundos subterráneos, la Luna, Marte, Venus y otros planetas.
Pero también existen quienes pretenden mantener contacto con Dios, los ángeles, los fallecidos, los elementales… Por eso el fenómeno contacto trasciende las fronteras de la ufología. Aunque en esta ocasión me concentraré en estos márgenes del debate.
Como describo detalladamente en “El gallego sabio”, durante los primeros años del fenómeno OVNI casi nadie identificaba los primeros Platillos Volantes como naves extraterrestres. Esa hipótesis va tomando forma en el imaginario colectivo, a partir de 1950, paralela a la carrera espacial de EEUU y la URSS. Es lógico. Y en 1952, a la vez que van añadiéndose otros elementos a la mitología OVNI -que no están presentes en el fenómeno original-, surge el fenómeno de los contactados.
El primero en obtener reconocimiento internacional, marcando las directrices de como evolucionaría el contactismo en el futuro, fue George Adamski.
De origen polaco, pero asentado en EEUU desde que tenía dos años, en 1940 Adamski, que ya había fundado una secta esotérica denominada “La real orden del Tibet”, se mudó con varios de sus alumnos místicos al Monte Palomar (California), donde construyeron un centro para sus clases y un restaurante: el Palomar Garden´s Café. En torno a él surgiría el primer movimiento contactista. Y el 20 de noviembre de 1952, y aunque afirmaba haber fotografiado Platillos Volantes con anterioridad, Adamski y varios interesados en los “platillos” realizan una excursión al desierto centralde Arizona, como muchos aficionados, buscando ver Platillos Volantes. En un momento determinado avistan un objeto fusiforme en el cielo, similar a un cigarro puro y detienen los coches. Adamski tiene la intuición –dice- de que algo va a ocurrir y le pide a sus acompañantes que le dejen internarse solo en el desierto. En la distancia, sus acompañantes –a través de prismáticos- ven que el “profesor” se encuentra con alguien entre las rocas. Más tarde firmarían sendas declaraciones ante notario, ratificando que el encuentro y el avistamiento se produjeron.
Cuando Adamski regresa al grupo, visiblemente excitado, relata que ha tenido un primer encuentro con Orthon, un extraterrestre llegado del planeta Venus. Uno de sus acompañantes saca moldes de escayola de las huellas dejadas por el supuesto venusiano, en las que se aprecian unos extraños símbolos supuestamente impresos en la suela de sus botas…
Adamski publicó tres libros que describen sus encuentros con alienígenas de aspecto nórdico y sus viajes con ellos a bordo de sus naves espaciales: “Flying Saucers Have Landed” (coescrito con Desmond Leslie) en 1953, “Inside the Space Ships” en 1955, y “Flying Saucers Farewell” en 1961. Los dos primeros libros fueron best seller y en 1960 ya había vendido más de 200.000 ejemplares. Lo que generó infinidad de imitadores en todo el mundo, que también afirmaban mantener contacto con los tripulantes de los Platillos Volantes.
Las espectaculares fotografías que Adamski presentaba como aval de sus contactos con Orthon dieron la vuelta al mundo, convirtiéndose en la imagen arquetípica de los Platillos Volantes “auténticos”.
Siragusa fundaría el Centro de Estudios para la Fraternidad Cósmica, afirmando estar en contacto con extraterrestres de diferentes planetas y vinculando la figura de Jesús y la Virgen María con la supuesta presencia alienígena en la Tierra. Entre 1952 y 1962 “recibió” (o redactó) cientos de supuestos mensajes de los guías extraterrestres sobre diferentes materias: reencarnación, religión, ecología, etc. Y comenzó a enviar cartas con sus “revelaciones” a todos los Jefes de Estado del mundo, la ONU, el Vaticano, etc. Aunque solo el jefe de gabinete del General Charles de Gaulle y el Santo Padre, Pablo VI, respondieron a sus cartas. Pero en poco tiempo Siragusa se convirtió en una celebridad internacional que visitaba los platós de las principales televisiones europeas y americanas, era portada de diarios y revistas e influyó notablemente en los cultos OVNI que llegaron después.
La gran mayoría de los contactados afirma que sus contactantes son civilizaciones extraterrestres que visitan nuestro planeta a bordo de naves espaciales. Aunque también existen cultos OVNI que señalan otros orígenes: el mundo subterráneo, dimensiones paralelas, etc.
Aunque con excepciones muy contadas, el fenómeno contacto se circunscribe casi exclusivamente al contexto judeocristinano. Por supuesto existe abundante casuística OVNI en otras culturas, pero que no ha generado cultos religiosos como ocurre en Occidente.
Los llamados cultos ovni, sectas platillistas, etc., han sido objeto de numerosos estudios académicos por parte de antropólogos, sociólogos y psicólogos, que sugieren un origen puramente psicosocial a este fenómeno.
Para la mayoría: en la segunda mitad del siglo XX se produjo un desarrollo tecnológico que, unido al inicio de la exploración espacial y al naciente fenómeno de los Platillos Volantes, comenzó a sustituir las religiones tradicionales -esencialmente el cristianismo- por una nueva espiritualidad más tecnocrática. En la que las figuras religiosas tradicionales: ángeles, demonios, Jesucristo, la Virgen María, etc., fueron reinterpretados como seres extraterrestres.
De esta forma, los antiguos milagros, fenómenos místicos y prodigios sobrenaturales, descritos en los textos sagrados, fueron objeto de un revisionismo en clave alienígena, más comprensible por el público occidental del siglo XX.
Como ya he dicho, el movimiento contactista, que surge en 1952 en EEUU en plena Guerra Fría y con un evidente temor a la energía atómica tras las explosiones de Hiroshima y Nagasaki, se expande rápidamente por todo el mundo. Y tras Adamsky, Daniel Fry, George van Tassel, Truman Bethurum o Howard Menger, se fundan cultos a los extraterrestres en todo el mundo.
David Stupple y William McNeece señalan la existencia de cuatro elementos necesarios en los cultos ovni:
a) un líder mistagogo, según el término de Weber, es decir, que tiene un poder mágico o taumatúrgico.
b) que tenga comunicación con los extraterrestres.
c) una comunidad epistémica, es decir, una organización de gente que utiliza procedimientos comunes para crear sistemas de realidad.
d) una subcultura base, que es un sistema de creencias oficial del culto ovni.
Se han propuesto varias tipologías para clasificar el contactismo extraterrestre desde distintos criterios, sin que ninguna de ellas llegue a compendiar y estructurar de una forma coherente toda la variedad de estas prácticas a nivel internacional. Así, por ejemplo, Stupple distinguió entre contacto psíquico, grupos neoteosóficos, grupos religiosos y otros, sin cubrir de una manera integral y distintiva toda la variedad de comportamientos contactistas.
John Saliba, por su parte, divide los grupos y movimientos de culto ovni en tres clases:
a) los que siguen la tradición teosófica (que se comunican mediante mediums con los hermanos del espacio, a los que se equipara con los maestros de la Sociedad Teosófica);
b) los grupos de tradición espiritista (en los que se da poca importancia a las naves de otros planetas, pues los guías se encuentran en otro plano de existencia, que es el reino etéreo;
c) los movimientos cristianos (que se preparan para alcanzar un próximo nivel del ser que llegará escapando de la destrucción de este planeta a bordo de un platillo volante).
Comprendo que esa etiquetas y clasificaciones son necesarias en el ámbito académico, pero pienso que no trasmiten de forma veraz la complejidad del fenómeno contacto.
Yo no me basaré en la bibliografía, ni en los papers académicos. No utilizaré fuentes abiertas, hemeroteca ni archivos ajenos, sino mi propia experiencia personal con docenas, quizás cientos, de contactados OVNI. Porque para contarlo antes hay que vivirlo… Y yo lo viví.
Entre la inmensa cantidad de colectivos existentes, he escogido un puñado de casos que, desde perfiles muy diferentes, ilustran la complejidad de este fenómeno.
Y que se parecen mucho a un viaje por el antiguo oeste. Un territorio sin ley. Nuevo. Inexplorado. En el que te vas topando con forajidos, colonos, indios y vaqueros, exploradores, cazafortunas, misioneros, prostitutas, y el Séptimo de Caballería…
En 2011 el director Jon Favreau estrenó “Cawboys & Aliens”. Una superproducción de Hollywood protagonizada por Indiana Jones (Harrison Ford), James Bond (Daniel Craig) y la Gozeriana de Los Cazafantasmas (Olivia Wilde). Una mezcla alquímica inspirada en la abundante bibliografía ufológica sobre los avistamientos OVNI en el Far West norteamericano. Pro-verbial guía para esta exploración de uno de los suburbios peor conocidos del poliédrico fenómeno OVNI.
Bienvenido al lejano oeste de la ufología. Un viaje alucinante a los rincones más desconocidos de la mística tecnofílica del siglo XXI.
COMPRAR AHORA
EPIFANIAS OVNI con envio certificado a España.
miércoles, 13 de marzo de 2024
"EPIFANIAS OVNI. Contactados y sectas ufológicas: los auténticos, los falsos y los chalados" CUADERNO DE CAMPO 11 de Manuel Carballal. SUMARIO
INDICE
Introducción
Parte I
LOS AUTÉNTICOS
CASO 1. Dos críos y un destino
Un “chalado” en la cámara de los lores – Abrir la mente – Después del avistamiento – Lo que aprendimos de la experiencia OVNI
Clave 33 – La iniciación solar – El mensaje extraterrestre… real – Amén se escribe sin tilde
CASO 3. Sola ante el peligro
Fenómenos extraños – Crónica de un avistamiento previa cita - La rosa y el polígrafo – Lo importante del mensaje… es el mensaje.
Parte II
LOS FALSOS
Y vendrán falsos profetas
CASO 4. El contacto tenía un precio
La cronología siempre dice la verdad – Canarias: la tierra prometida – Aztlán $A – Geenom es nombre de mujer
Los OVNIs del 2F… otra vez – Contactados contra investigadores - Dos policías y un contacto – Ultra catolicismo alienígena – Las flechas sin punta
CASO 6. L@s Foragid@s
RAMA antes de RAMA – Sixto, Benítez y yo – Todo es mentira, salvo alguna cosa – Charly versus Verónica
CASO 7. Duelo al sol
La Hermandad RAMA – La verdadera razón del fin de Misión RAMA
CASO 8. Le llamaban Trinidad
El Comando Asthar – Asthar intercepta la señal de televisión – Otra vez Canarias
CASO 9. Sin Perdón
El San José de Valderas gallego – Los testigos – El autor
CASO 10. La leyenda del Z(M)orro
El contactado total – Crop Circles – El testigo perfecto – Fotos paranormales – Médium, psíquico, sanador – Morir por la fe en un engaño
Parte III
LOS “CHALADOS”
La psiquiatría de lo paranormal
CASO 11. Siete OVNIs para siete hermanos
El Caso Gelabert – De la Misión RAMA a la Misión RANA – Los Berberechos Blues
CASO 12. La leyenda del planeta sin nombre
El Mesías esperado – La célula detective
Las enseñanzas de Raticulín – Bulerías extraterrestres
CASO 14. Un hombre llamado Caballero
El Cristo del santo churro – Fiu, fiu, fiu – Benditos seáis todos en el nombre de Yavhé
El bueno, el feo, el malo y John From
El mito no es el hecho – La punta del iceberg
Los emisarios del engaño
El contactado terrorista
Los animalistas del espacio… o del futuro
Anexo:
CASO 15. El origen del mito
Una historia inaceptable – Todos contra Adamski - ¿Y si fuera verdad? - ¿Y si nunca fueron extraterrestres?
Video:
Ya disponible en Amazon, Ebay, TodoColección, SecretShop.Website, Editorialelojocritico.com, etc.
COMPRAR AHORA
EPIFANIAS OVNI con envio certificado a España.
jueves, 30 de noviembre de 2023
ESTA NAVIDAD, LOS CUADERNOS DE CAMPO DE MANUEL CARBALLAL, POR LOTES TEMÁTICOS
De cara a la Navidad, las amigas de SecretShop.Website han preparado varios lotes y packs de Cuadernos de Campo, agrupados por temas, materias y especializades (Ufología, Criminología, Sectas, Biografías, etc), con objeto de que el interesado ahorre en los gastos de envio.
Esos packs y lotes pueden verse en el siguiente enlace: https://www.todocoleccion.net/buscador?bu=Carballal&identificadorvendedor=museode
Y también en la nueva web de la Editorial EOC: www.editorialelojocrítico.com
viernes, 15 de septiembre de 2023
"INVESTIGACIÓN PSI" EN "EL CENTINELA DEL MISTERIO"
sábado, 3 de junio de 2023
INVESTIGACIÓN PSI: UNA HISTORIA DE LA PARAPSICOLOGÍA CIENTIFICA Y UNIVERSITARIA EN ESPAÑA. Cuaderno de Campo 10 de Manuel Carballal
Disponible a partir del 8 de junio de 2023
"INVESTIGACIÓN PSI: UNA HISTORIA DE LA PARAPSICOLOGÍA CIENTIFICA Y UNIVERSTARIA EN ESPAÑA".Más de 670 páginas, más de 525 fotografías y documentos, más de 40 años de investigación científica y universitaria de los fenómenos PSI en laboratorio...
Disponible a partir del 8 de junio de 2023
COMPRAR AHORA
"Investigación PSI" con envío certificado a España
martes, 30 de mayo de 2023
"INVESTIGACIÓN PSI: UNA HISTORIA DE LA PARAPSICOLOGÍA CIENTIFICA Y UNIVERSITARIA EN ESPAÑA". Manuel Carballal. INTRODUCCIÓN
A
la memoria del Dr. Alfredo Bonavida, el sabio bueno.
Y
en homenaje a Anabela Cardoso, Juan Carlos Hernández Carrica, Eduardo
Balanovsky, José de Solas, Germán de Argumosa, Miguel Ángel Romero, Francisco
Mañez, Álex Escolá-Gascón, Ramos Perera, Óscar Iborra, José Miguel Pérez
Navarro, José Antonio Lamich, Antonio Sánchez Arjona, Sinesio Darnell, Jaume
Esteve, José Luis Ortiz y todos los científicos, académicos e investigadores
que se atrevieron a llevar la parapsicología al laboratorio, a las
publicaciones científicas y a la universidad en España
“Recuerda,
solo te ofrezco la verdad. Nada más”
Morfeo
– The Matrix
INTRODUCCIÓN
El Dr. Josef Allen Hynek decía que “la ufología no investiga OVNIs, sino relatos sobre OVNIs”. Y esa es la gran diferencia entre la ufología y la parapsicología. La segunda no solo investiga relatos sobre lo paranormal, sino el hecho paranormal en sí. Y lo hace en el laboratorio.
Este Cuaderno de
Campo no trata sobre el trabajo de campo, sino del trabajo de laboratorio y su
repercusión en el ámbito académico y universitario.
En este caso
-solo en este caso- los testimonios humanos carecen de interés, en comparación
con los experimentos en condiciones de control.
Existen
científicos de gran prestigio y currículums académicos intachables, incluyendo
numerosos premios Nobel, que han tenido la osadía de adentrarse más allá de los
límites de lo conocido. Poniendo en riesgo, con impagable valor y audacia, su
credibilidad académica.
He conocido
personalmente, y he podido colaborar con algunos doctores, profesores,
catedráticos e incluso algún premio Nobel, que aseguran, sin pudor, que lo
paranormal existe y merece ser investigado científicamente.
Probablemente la
mayoría te son desconocidos, porque abominan de los medios especializados.
Incluso del estigmatizado término “parapsicólogo”.
La mayoría han
trabajado encerrados, como ermitaños, en sus laboratorios. Viviendo, lejos de
miradas curiosas, su romance con el conocimiento y la ciencia. Y no encontrarás
el fruto de ese romance en revistas comerciales, libros sensacionalistas o
programas de gran audiencia. Porque lo que hacen no vende. Y lo que es aún
peor, puede hacer que los que venden falsos misterios, vendan menos…
Sus estudios, de
publicarse, lo hacen en aburridas revistas académicas de impacto y de revisión
por pares. O en tediosos libros técnicos. Y cuando llegan al conocimiento de
quienes no entienden la trascendencia de sus aportaciones, normalmente solo
reciben incomprensión o desprecio. No solo por parte de la comunidad académica,
que por ignorancia considera lo paranormal indigno de tratamiento científico,
sino -esto es más triste- por parte de los entusiastas del misterio, que no les
escuchan decir lo que quieren oír.
Por eso, la
parapsicología científica se ha convertido en una disciplina que requiere de un
“apellido” para diferenciarse de la parapsicología comercial o de
entretenimiento. Como ocurre con la hipnosis o la ufología.
A pesar de que
existen pseudo medicinas, pseudo física o pseudo historia, nadie habla de
“medicina científica”, “física científica” o “historia científica”. El
calificativo no es necesario. En el caso que nos ocupa, ese “apellido” se ha
convertido en una coletilla imprescindible para diferenciar esa parapsicología,
la de verdad, del clon, del egregor, del tulpa, del gólem, del monstruo de
Frankenstein que ha terminado devorando a su creador.
En su primera
acepción, la Real Academia Española (RAE) define el término “cultura” como:
“Conjunto de conocimientos que permite a alguien desarrollar su juicio
crítico”. Por tanto, me atrevo a definir la cultura del misterio como el
conjunto de conocimientos que nos permite desarrollar nuestro juicio crítico
con relación al mundo de las anomalías. Y ese juicio solo será veraz si no
excluye el conocimiento de los hechos reales, objetivos y empíricos -los
replicados en laboratorio- aún a riesgo de que la conclusión no sea tan
sensacional -o sensacionalista- como la que nos dibujan los grandes
divulgadores o los profesionales del misterio.
Qué es y qué no es parapsicología
El diccionario médico de la Clínica Universidad de
Navarra define el término parapsicología como:
“f. Estudio de los fenómenos paranormales; es decir, de aquellos fenómenos
psíquicos que no tienen explicación a partir de los principios científicos
reconocidos. Se distin-guen dos tipos principales de fenómenos paranormales: la
psicoquinesia, también llamada telecinesis, y la percepción extrasensorial. La
primera se refiere al poder de las voliciones del sujeto sobre la materia. La
percepción extrasensorial (ESP o extrasensory perception) consiste
en la adquisición de información del ambiente sin emplear modalidades
sensoriales conocidas. [1]
No está mal para
ser una definición emitida por un diccionario académico español. Pero se ha
quedado un poco obsoleta.
La Parapsychologycal Association (PA) es, en la actualidad, la organización de parapsicología científica más relevante. Integrada desde 1969 en la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, organización -entre otras cosas- editora de la revista Science. Probablemente una de las revistas científicas más influyente del mundo.
En 1989 la PA
llegó a un consenso para definir parapsicología como: ”la ciencia que estudia
aparentes anomalías del comportamiento y la experiencia que existe junto o al
margen de los mecanismos explicativos actualmente conocidos, que dan cuenta del
flujo de información e influencia entre organismo y entorno, y entre organismo
y organismo”.
“Esta definición –explicaba el Dr. Óscar Iborra, en uno
de sus artículos publicados en El Ojo Crítico- es específica y por tanto
útil. Sin embargo, no asume que los fenómenos parapsicológicos, de existir,
sean paranormales. Es decir, no asume que tal cosa como lo paranormal exista o
sea la causa de los fenómenos parapsicológicos. Esto no es un juego de
palabras. Es fundamental. Y una de las razones por las que la investigación
científica en parapsi-cología no interesa a nadie. Porque no es lo mismo la
definición anterior que afirmar que la parapsicología estudia los fantasmas o
los poderes psíquicos. Esta segunda definición lleva implícito que los
fantasmas y los poderes psíquicos son reales, lo cual no podemos afirmar”. [2]
“Percepción extrasensorial (ESP): Una experiencia extrasensorial es una experiencia en la que parece
que la mente del sujeto ha adquirido información directamente, es decir,
aparentemente sin la mediación ni de los sentidos humanos reconocidos ni de
procesos de inferencia lógica. Se establece una subdivisión entre telepatía
(aparente comunicación mente a mente), clarividencia (aprehensión extrasensorial
de cualquier clase de acontecimiento objetivo), precognición (ESP aparentemente
desplazada en el tiempo, hacia el futuro) y retrocognición (similar a la
anterior, pero hacia el pasado). Los términos percepción extrasensorial,
telepatía, clarividencia, precognición, etc., harían referencia a hipotéticos
procesos paranormales, que en teoría darían cuenta de determinado fenómeno
parapsicológico; pero este proceso puede existir o no. Sin embargo, expresiones
como experiencia extrasensorial, experiencia telepática, etc., designan eventos
que ocurren, experiencias que la gente tiene, y que aparentemente sugieren la
operación de un proceso paranormal.
“Psicokinesis (PK): Una experiencia
PK implica un aparente efecto de la mente sobre la materia, esto es, un caso
donde la intención o las preferencias de un individuo parecen haber tenido una
influencia directa sobre la estructura del entorno físico. La influencia
aparentemente ocurre sin la mediación de energías o mecanismos físicos
reconocidos, particularmente los que comprenden al sistema motor humano.
Actualmente, se distingue entre macro-PK y micro-PK. Macro-PK hace referencia a
fenómenos en los que la alteración física en el entorno supuestamente producida
por PK es observable a simple vista. Un conocido ejemplo de esto es el “doblado
de cucharas”. Micro-PK hace referencia, por el contrario, a cuando no podemos
verificar a simple vista si se ha producido ese efecto, y por tanto hemos de
recurrir al análisis estadístico. Por ejemplo, son estudios de micro-PK los
experimentos en los que un individuo intenta influir sobre el funcionamiento de
un sistema que genera secuencias al azar. Un tercer grupo es el denominado
DMILS, siglas que significan (en inglés) interacción mental directa con seres
vivos. Estos estudios intentan comprobar la influencia PK sobre organismos
vivos”. [3]
Vamos, que la parapsicología no se ocupa de los OVNIs, ni del Yeti, el Triángulo de las Bermudas, la astrología, los duendes, las conspiraciones, los chakras, los alienígenas ancestrales, la energía piramidal, la alquimia, ni casi nada de lo que puedes encontrar en una revista, un programa o un canal de misterios que se autodefine como “parapsicológico”.
Juan Carlos Hernández Carrica lo resume en una frase
lapidaria: “la parapsicología estudia el más acá, no el más allá”.
Sin embargo, desde hace unos años, es cierto que ha
surgido una tercera clasificación de fenómenos que algunos parapsicólogos -no
todos- han asumido como campo de estudio científico:
“Hipótesis de la supervivencia (Survey): Junto a ESP y PK hay un tercer dominio tradicional en parapsicología,
denominado “grupo survey”, que concierne a la hipótesis de la
supervivencia, esto es, la noción de que algún elemento de la existencia humana
sobrevive a la muerte física. Mucho del interés original de los investigadores
psíquicos (antecesores de la investigación en parapsicología) en esta área se
centró sobre las supuestas comunicaciones con seres fallecidos a través de los
médiums. Otros fenómenos que se incluyen en este dominio son: experiencias
cercanas a la muerte (NDE), experiencias fuera de cuerpo (OBE), apariciones,
casas encantadas, poltergeist o reencarnación, entre otras. Los parapsicólogos
modernos continúan investigando este tipo de experiencias, más por estudiar el
fenómeno en sí mismo que por validar la hipótesis de la supervivencia.
Actualmente, algunas de estas experiencias tienden a ser incluidas dentro del
ámbito de la psicología de la experiencia anómala, que las aborda desde un
punto de vista más amplio, fenomenológico. De los tres grupos, este es el más
difícil de estudiar bajo el método experimental”. [4]
Un golpe de estado en la ciencia
En parte por los
fenómenos survey, en la actualidad la inmensa mayoría del gran público cree que
la parapsicología busca espíritus en casas abandonadas. Que un parapsicólogo
adivina el futuro echando las cartas o leyendo las líneas de la mano. O que cura
enfermedades con remedios ancestrales. Y eso no solo es falso, es que además es
justo lo contrario a la realidad.
De la misma
forma en que un oncólogo no es quien padece un cáncer, sino quien lo estudia, o
del mismo modo que un hipnólogo no es quien se sube a un escenario o un plató
de televisión para ridiculizar al público, sino el médico o psicólogo que lo
usa como terapia.
Igual que un instagramer
que monta sus videos no es un realizador de cine, ni un bloguero es un
licenciado en ciencias de la información, aunque alguno se lo crea; un
divulgador de misterios, una echadora de cartas, un médium o un curandero, no
son parapsicólogos. Pese a que algunos se presenten como tales. Ellos son el
objeto de estudio, no el investigador.
Ocurre lo mismo
que con la astronomía o la química. Cierto es que ambas disciplinas académicas
tienen su origen en la astrología y la alquimia, pero solo las personas más
ignorantes continúan pensando hoy que los astrónomos hacen horóscopos o los
químicos buscan la piedra filosofal. Exactamente eso es lo que ocurrió con la
parapsicología. Aunque tenga su origen en el estudio crítico del espiritismo
del siglo XIX, solo los más desinformados pueden creer hoy que la
parapsicología busca espíritus o fantasmas. O que intenta demostrar la
existencia del más allá. No es así. “La parapsicología estudia el más acá”.
Aunque la Real
Academia Española define el término “revisionismo” como: “Tendencia a someter a
revisión metódica doctrinas, interpretaciones o prácticas establecidas con el
propósito de actualizarlas y a veces negarlas”, hoy el sustantivo se utiliza
como adjetivo polarizado ideológicamente en el contexto político. En mi caso,
asumiré el riesgo de las etiquetas ideológicas al afirmar que el objetivo de
este Cuaderno de Campo es someter la historia de la parapsicología científica y
académica en España a una revisión crítica.
Mocatrices y mocactores del
misterio
En el siglo XXI,
el de la supremacía digital, existen personas que, sin ningún tipo de formación
ni experiencia, se convierten en referentes “culturales” solo por haberse
casado con alguien famoso o por acumular millones de seguidores en redes
sociales.
El grupo musical
satírico Ojete Calor acuñó el término mocatriz para referirse a
esas modelos, cantantes o actrices (o actores), que aspiran al éxito y la fama,
sin haber dado un palo al agua. [6]
Mientras que
otros profesionales de la moda, la música o la actuación se pasan años
estudiando, formándose, practicando y buscando una oportunidad.
En el mundo de
las anomalías también abundan los mocactores y las mocatrices,
con millones de seguidores en Youtube, Ivoox, Instagram, Tik Tok, etc., que con
una absoluta falta de cultura del misterio -y de la otra-, son convertidos por
obra y gracia de los algoritmos, en influencers de las nuevas
generaciones interesadas en lo paranormal.
Tan intrusistas
en la parapsicología como un cartomante, un médium o un sanador, y responsables
de la gran confusión que hoy colapsa mediáticamente esta disciplina.
Disciplina que
un puñado de científicos, audaces, abnegados y profundamente desconocidos,
continúan luchando por mantener dentro del laboratorio y del ámbito académico.
Su hábitat natural.
Por eso, hoy
quiero rendirles un humilde homenaje a ellos. Al menos a los que yo he tenido
el honor de conocer personalmente durante las últimas cuatro décadas.
Por supuesto, la
historia de la parapsicología española es anterior. Para quien esté interesado
recomiendo la obra de la historiadora Andrea Graus. [7] Y la de la también historiadora Annette
Mülberger. [8]
Tampoco te
hablaré de Rhine, de Richet o de Tenhaeff y ni siquiera de Grinberg, porque no
los conocí personalmente (aunque con el último hablé por teléfono una vez). Ya
hay miles de libros que relatan sus aportaciones al tema si tienes interés. Yo,
como en todos mis Cuadernos de Campo, solo te hablaré de esos hombres y mujeres
audaces que he tratado en persona. Y creo que no es poco.
Para concluir,
es de justicia dejar claro que a partir de las próximas páginas son todos los
que están, pero no están todos los que son. Quiero decir que mis Cuadernos de
Campo solo contienen mis memorias como investigador de los fenómenos anómalos,
así que solo hablo de lo que he conocido directamente. Porque, para contarlo,
antes hay que vivirlo…
Y aunque soy
consciente de que voy a narrar cosas absolutamente increíbles -incluso a mí me
cuesta creerlas a pesar de que las he vivido-, sostengo enérgicamente que todo
lo que vas a conocer a partir de ahora es absolutamente real. Por eso seré
especialmente generoso en la cantidad de fotos, documentos y evidencias que
incluiré en cada capítulo.
Además, he
subido a Youtube, Instagram e Ivoox los documentos de video y audio que
avalarán cada afirmación extraordinaria, con pruebas extraordinarias.
Experimentos, conferencias, programas, entrevistas, etc.
En las próximas
páginas encontrarás cientos de enlaces, urls y códigos QR que te llevarán
directamente a esos documentos de audio y video en cada capítulo. Soy
consciente de que, pese a este esfuerzo, que me ha llevado durante los últimos
meses a jornadas intensivas de escaneo, digitalización, documentación, etc., de
entre hasta 18 y 20 horas diarias (y lógicamente al hospital) lo que vas a
leer, ver y escuchar es muy difícil de asumir. Lo sé. Pero yo no puedo hacer
más.
Me consta que
han existido, en los últimos 40 años, muchos académicos, catedráticos y
profesores universitarios, doctores e investigadores, que han explorado en
laboratorio los fenómenos PSI. Pero prefiero no opinar de lo que no he conocido
personalmente. Pido disculpas si alguien se siente ofendido por esas ausencias.
Con frecuencia habrás escuchado en programas de radio o televisión, o habrás leído en algún libro, revista o Internet, el mismo discurso repetido por charlatanes pseudo científicos o pseudo escépticos: ¡La parapsicología no es una ciencia! ¡La universidad no estudia lo paranormal! ¡Los fenómenos PSI no se repiten en laboratorio! Esa patraña ha llegado hasta hoy. Pero aquí concluye el embuste.
[2]
Iborra, Óscar. “La investigación científica en parapsicología… y porque no interesa
a nadie”. El Ojo Crítico, nº 88. Marzo de 2019.
[3]
Ibidém.
[4]
Ibidém.
[5]
Me refiero a los mecanismos del fenómeno, no a las informaciones que puedan
transmitir, que sí podrían ser objeto de estudio parapsicológico. En el caso de
la Kirlian hay matices que luego verás.
[7]
Graus, Andrea. “Ciencia y espiritismo en España 2880-2930”. Comares, 2019.
[8]
Mülberger, Annette. “Los límites de la ciencia. Espiritismo, hipnotismo y el
estudio de los fenómenos paranormales. 1850-1930). CSIC, 2018.
"INVESTIGACIÓN PSI: UNA HISTORIA DE LA PARAPSICOLOGÍA CIENTIFICA Y UNIVERSTARIA EN ESPAÑA".
Más de 670 páginas, más de 525 fotografías y documentos, más de 40 años de investigación científica y universitaria de los fenómenos PSI en laboratorio...
Disponible a partir del 7 de julio de 2023
COMPRAR AHORA
"Investigación PSI" con envío certificado a España
"EPIFANIAS OVNI" en La Rosa de los Vientos
El pasado 11 de marzo la sección "El círculo secreto" del programa "La Rosa de los vientos", en ONDA CERO , estuvo dedi...
-
En enero de 2018 reapareció fugazmente en el plató del programa Got Talent de Telecinco , pero casi nadie lo reconoció. Llevaba die...
-
12 de febrero de 2021. Los micrófonos de Metropólitan Radio se abren para iniciar una emisión especial de "EL Centinela del Misterio&...
-
“Todo el Arte de la Guerra se basa en el engaño. El supremo Arte de la Guerra es someter al enemigo sin luchar”. General Sun Tzu. “El ar...